jueves, 24 de septiembre de 2009

Sur


A veces me da la impresión de que el esfuerzo no se ve recompensado. No sé. Puede que por mucho que intentemos hacer bien las cosas SIEMPRE hay algo que se sale de nuestro alcance y que no controlamos.Puede que incluso no nos controlemos a nosotros mismos. Y yo sí, soy imperfecta, y no puedo pasar sin admitir que no, a veces no soy capaz de controlarme. Los impulsos. Las emociones. Llegan a ser más fuertes que tú. Y o te controlas, o te pierdes.
"Déjame en paz", "No, no, quédate", "Olvídame", "No me dejes nunca", "Te odio", "Te quiero"...
Somos una montaña de contradicción. O una maraña de impulsos eléctricos que no nos dejan actuar con lógica.
Hizo frío, fue uno de esos días en los que el viento te araña la piel y de camino a casa me dejé llevar por uno de esos impulsos. Y cuando te dejas llevar por uno de ellos solo sientes escarcha en los huesos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario